Se dice mágico porque todos estos lugares son territorio de peregrinos, meigas y
santa compaña.
Desde mucho antes que Santiago de Compostela se convirtiera en merchandising católico, circulaban por aquí otros cristianos, más acordes con el espíritu libre y con el placer en lugar del dolor como
camino a la salvación.
A
San Andrés de Teixido va de muerto quien no fue de vivo, y se quedan tan a gusto. Te lo sueltan nada más llegar mientras degustas unos maravillosos percebes.
Es por ello que este camino lo recorren vivos y muertos, por éso es mágico.
Desde
Cedeira, por la costa, sujeto a vientos y
nieblas, va el camino, subiendo
montañas y rodeando
acantilados, algunos de los cuales son de los más altos de Europa.
Galicia desconocida, para aventureros. No hace falta irse a
Brasil para vivir una aventura, basta con andar el camino a San Andrés.