Después de que los Reyes Católicos visitaran Santiago de Compostela, ordenaron construir un hospital que acogiera a los peregrinos que terminaban el Camino de Santiago. Ese hecho se recuerda con una inscripción en latín en el friso ubicado sobre la portada, flanqueada además por medallones con las imágenes de ambos monarcas. El edificio es de estilo gótico plateresco, de su diseño se encargó el arquitecto Enrique Egas. Del exterior uno de los elementos más llamativos es la portada plateresca, decorada con las figuras de Adán, Santa Catalina y San Juan Bautista a la izquierda y Eva, Santa Lucía y María Magdalena a la derecha.