Es un
pueblo muy tranquilo e ideal para alejarse y desconectar un poco de todos los quehaceres de la vida cotidiana, y estar en contacto con la
naturaleza. Tiene las
playas de Esteiro a tan solo 5 km. Por lo tanto no hay por que elegir entre
playa o
montaña, ya que el que viva en
Silvosa tiene las dos cosas a su alcance.