El topónimo "Antas" significa dolmen o
monumento funerario megalítico, lo que ya da idea de la
antigüedad de los asentamientos de población en estas tierras. En todo el municipio existe gran cantidad de restos arqueológicos, pero lo que más caracteriza la
historia de Antas son sus leyendas, que hablan de tesoros escondidos bajo los castros, cultos en
Monte Farelo y en Ponte Pedriña, o multitud de leyendas de moros y encantamientos, relacionadas todas con la historia
medieval de la zona.