No es hasta el año 1840 cuando surge el municipio de
Bóveda tal como lo conocemos hoy.
Antiguamente el patrón del
pueblo no era
san Gil, sino san Martín, al igual, que la
iglesia, y por tanto las
fiestas patronales eran en Noviembre, sin embargo en el interior de la iglesia parroquial existía la imagen de san Gil, como podía existir de otro
santo, un buen día la imagen de san Gil, desapareció de la iglesia y apareció en el
monte que hoy lleva su nombre, junto a una
fuente, este fenómeno se repitió durante varios días, hasta que los vecinos decidieron construir en ese monte (hoy san Gil) la
capilla del santo, actual patrón de la villa, y donde todavía se puede contemplar, la capilla y la fuente.