Es posiblemente el símbolo arquitectónico más importante del
ayuntamiento de
Friol. Se trata de una edificación de origen desconocido y reconstruido en el Siglo XVI. Tiene su propia leyenda y forma parte del
escudo heráldico de Friol. Hoy, propiedad de la Diputación Provincial, está convertido en
museo etnográfico y es visitado por miles de personas todos los años