La
foto de los chorizos colgados me recuerdan a mi Abuelo galego. Todos los años en
invierno hacíamos: Chorizos, morcillas, jamones, filloas, pancetas... Cuánta
felicidad junta. Lo primero que comíamos eran las costillas del
cerdo a la parrilla. Todavía sigo con esa hermosa
costumbre con mis nietos. Gracias Abuelo Elías Calvo por dejarme esa herencia. Qué pena que te fuiste sin poder volver a tu
Galicia querida, mi GALLEGO GAUCHO como yo le decía. Yo lo hice y conocí su aldea Hermida, el
río Miño,
... (ver texto completo)