Monterroso se encuentra situado a 39 kilómetros de la capital y cuenta con una superficie de 118 kilómetros cuadrados.

Son numerosos los vestigios arqueológicos que albergan estas tierras, con numerosos castros, que no siempre están bien conservados. Los pazos y casas nobles revelan su pasado señorial. Entre ellos destaca el pazo de Podente, en la parroquia de Esporiz, aunque existen otros muchos ejemplos en distintas parroquias del municipio.

El topónimo de Monterroso parece hacer referencia a la calidad de sus tierras; algunos autores lo relacionan y lo hacen derivar de dos vocablos latinos: montem (monte) y russu (rojo), mientras otros afirman que el término hace referencia a los numeroso brezos que había antiguamente en el lugar. Sea como fuere, lo cierto es que en estas tierras existen abundantes vestigios que delatan que ya fueron pobladas en epocas prehistóricas. También existen restos de la presencia romana en la zona y también numerosas construcciones de la Edad Media

Son muchas las gratas sorpresas que el viajero puede encontrar en las tierras de Monterroso. La primera de ellas es la de toparse con bellos ejemplares de arquitectura popular, como los "cabeceiros", una especie de hórreo-cesto, circular u ovalado, realizado con palos entretejidos y recubiertos con paja. A lo largo de todo el territorio también hay un buen número de casas solariegas e iglesias de diferentes estilos. Para conocer todos estos tesoros se han habilitado numerosas rutas de indudable interés.