Visité casi durante 25 años esa población en sus veranos, disfrutando de la feria y del San Roqué. volví recientemente y me hizo recordar esos olores, esas gentes caminando de un lugar para otro en la feria... la actividad, distinta ahora que en aquella época que relato pues alcanzo pronto la cincuentena. Tampoco puedo olvidar sus fiestas, el bullicio de aquellas noches de estío divertidas, abiertas a todos incluso a los que siendo de las cercanías en sus parroquías acudíamos como si de un peregrinaje se tratara.
La iglesi el repique de campanas y ese tiempo a veces incierto que en más de una ocasión haabía dejado atrás horas de preparativo y festejo.
Recierdo el río, los baños, los senderos por los que caminar llegada esa larga tarde del verano que abraza la noche. He visto un parga diferente, como no podría ser de otro forma, peros sus casas me traen enormes y recuerdos y todo cambio debe ser objeto de saludo y espera
Gracias
La iglesi el repique de campanas y ese tiempo a veces incierto que en más de una ocasión haabía dejado atrás horas de preparativo y festejo.
Recierdo el río, los baños, los senderos por los que caminar llegada esa larga tarde del verano que abraza la noche. He visto un parga diferente, como no podría ser de otro forma, peros sus casas me traen enormes y recuerdos y todo cambio debe ser objeto de saludo y espera
Gracias