Este año el agosto mas caluroso que yo recuerde, pase unos dias inolvidables en este paraje con mis
amigos de siempre, y mi hijo Raul, descubrió
Lo maravilloso que era ese
río, a pesar de la sequía y la manera de lanzar
piedras, por fin en algun momento se le olvidó los
juegos del ordenador.
Gracias amigos y que lo conserveis siempre.