Pravia se encuentra a 10 km de la costa, pero la ría no se llama Ría de San Esteban de Pravia, ni Ría de Muros de Nalón, ni Ría de San Juan de la Arena, ni Ria del Nalón. Se llama Ría de Pravia y así aparece en toda la cartografía. Se llama Ría de Pravia como todas las rías del norte y oeste de España. Igual que la Ria de Ribadeo se llama así, no porque lo pretendan o pretendiesen los vecinos de Riabadeo hoy o en el pasado, ni tampoco porque exista ningún interés por apropiarse de algo en detrimento de otros. Se llama así porque Ribadeo es el enclave urbano, portuario y comercial más importante, en cuanto a dimensión y actividad de la ría. Asi sucede con la Ría de Villaviciosa, la de Aviles, la de Navia, la de Ribadesella, la de Lastres... Es decir todas las rías de Asturias. Esto es evidente, como también lo es que todas las cartas marinas y todos los documentos antiguos y concretamente las Cartas Oficiales publicadas cada diez años por el Instituto Oceanográfico así lo confirman. Como también es notorio que en Asturias hay un poderoso y amplio sentimiento de rechazo de esta realidad. Como también es evidente que en los últimos meses todos los partidos políticos se han apuntado a ese filón. El problema no es que a la ría se le llame de un modo u otro. Eso es intrascendente si se considera fuera de contexto. El problema es que teniendo un nombre oficial y coherente con la historia y la economía y la sociología de esta comarca y con las normas aceptadas para la toponimia de otros lugares de características similares hay un movimiento socio-político-cultural que quiere vulnerar este estado de cosas más o menos ordenado para imponer otro método excepcional, novedoso y rupturista. Lo menos que podrían explicar los promotores de esta esta propuesta es qué motivos tienen para proceder así. ¿Porque suscitan enfrentamientos entre vecinos que tienen problemas más graves que el nombre de un accidente geográfico?