Amigo Casa del Perú, hace tiempo que no nos deleitas con uno de los relatos de tu padre que a mi me recuerdan tanto a las “Memorias de un cazador” de Turgeniev. Yo tuve la suerte de conocerlo, ya en el ocaso de su vida y guardo un recuerdo entrañable de aquellas pláticas (como dicen los mejicanos) que tuvimos. Era un archivo viviente con una conversación amena, una memoria prodigiosa y una entrañable querencia hacia sus raíces gudiñesas. Una de las historias que más me impresionó, por lo inverosímil, fue la de “El Francés”, hablaba de él con ternura y admiración, como un niño que admira a su maestro, a pesar de su ya avanzada edad, era enternecedor. Me regaló una copia de una fotografia, el original me imagino que lo tienes tú, en la que se ve al "Frances" con sus alumnos en el campo, con una pizarra de fondo. Según él me dijo era por debajo de la "Cotarela", me imagino por "O Martin Vello" o por alli. Daba clase a sus alumnos en el monte, ¡un adelantado para la epoca!
Saludos
Saludos