A todos los de a Gudiña: felicidades en el día de nuestro santo patrón, Sebastián de Aparicio, y deseo que nos siga protegiendo a todos.
Desde aquí quiero compartir ese día con vosotros.
Digo San Aparicio, aunque sea Beato. Parece ser que le falta atribuirle un milagro.
Me gustaría saber si, en su singladura desde Sanlúcar a América no arribó "de milagro" después de enfrentarse a una tenebrosa travesía que muchos no lograron superar.
De ese viaje, creo que nada se sabe. Al menos en la Casa de Cotratación de Sevilla, en el archivo de Indias no lo he encontrado.
Desde luego, que el barco, no era precisamente el Cabo de Hornos, o el Cabo de Buena Esperanza, donde viajaron la mayoría e los emigrantes posteriores.
Duro tuvo que ser aquel viaje. Siempre esperando vientos propicios que hinchasen las belas.
Y calamitoso también.
Todos los que iban embarcados, tenían que colaborar en los quehaceres diarios. Aunque era mañoso, es de suponer que no estaría ducho en el manejo de las jarcias, del astrolabio, o de la brújula. Mas bien tendría que achicar el agua de las sentinas, que seguro se filtraba a pesar del buen calafateado que debían de llevar.
Claro que, el mejor calafate no se había descubierto, ya que este procedía de Calafate, donde se da este fruto, en la zona del Perito Moreno.
Y digo yo: A lo largo de nuestra corta vida, ¿cuantas veces no hemos dicho/oido?...
Estaba enfermo,... y se salvó de milagro.
Tuvo un accidente de coche.... y se salvó de milagro.
No sabía nadar... y se salvó de milagro.
etc. etc. et.
Se producen milagros todos los días, lo que pasa es que nos falta fe para creer en ellos.
Que lo paséis bien, y que pongáis una foto del Ramo.
Un abrazo
Desde aquí quiero compartir ese día con vosotros.
Digo San Aparicio, aunque sea Beato. Parece ser que le falta atribuirle un milagro.
Me gustaría saber si, en su singladura desde Sanlúcar a América no arribó "de milagro" después de enfrentarse a una tenebrosa travesía que muchos no lograron superar.
De ese viaje, creo que nada se sabe. Al menos en la Casa de Cotratación de Sevilla, en el archivo de Indias no lo he encontrado.
Desde luego, que el barco, no era precisamente el Cabo de Hornos, o el Cabo de Buena Esperanza, donde viajaron la mayoría e los emigrantes posteriores.
Duro tuvo que ser aquel viaje. Siempre esperando vientos propicios que hinchasen las belas.
Y calamitoso también.
Todos los que iban embarcados, tenían que colaborar en los quehaceres diarios. Aunque era mañoso, es de suponer que no estaría ducho en el manejo de las jarcias, del astrolabio, o de la brújula. Mas bien tendría que achicar el agua de las sentinas, que seguro se filtraba a pesar del buen calafateado que debían de llevar.
Claro que, el mejor calafate no se había descubierto, ya que este procedía de Calafate, donde se da este fruto, en la zona del Perito Moreno.
Y digo yo: A lo largo de nuestra corta vida, ¿cuantas veces no hemos dicho/oido?...
Estaba enfermo,... y se salvó de milagro.
Tuvo un accidente de coche.... y se salvó de milagro.
No sabía nadar... y se salvó de milagro.
etc. etc. et.
Se producen milagros todos los días, lo que pasa es que nos falta fe para creer en ellos.
Que lo paséis bien, y que pongáis una foto del Ramo.
Un abrazo