Todos los costaleros/portapasos que hicieron, hacen y harán posible que Jesús, La Virgen y todas las imágenes procesionen delante de un pueblo creyente, lo hacen voluntariamente, bajo su fe y el fervor que le da la libertad de poder expresar su amor. En ellos nos vemos representados todos los creyentes.
Para ello, hay que tener fe y ser capaces de amar, ya que al atardecer de la vida, es de lo que nos van a examinar.
Para ello, hay que tener fe y ser capaces de amar, ya que al atardecer de la vida, es de lo que nos van a examinar.