Despertado de la siesta, vengo a redactar el presente parte para invitar a los dos clérigos hospedados en ese hotel de Benidorm a tomarse sendos vasos de agua bendita a la salud de un servidor y su adorada Pita.
Nuestro feliz trío se conforma con desvirgar esta tarde una botellita de Ferreira, de las bodegas de Vilanova de Gaia.
Salud.
Nuestro feliz trío se conforma con desvirgar esta tarde una botellita de Ferreira, de las bodegas de Vilanova de Gaia.
Salud.