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BARXA: El pasado día de nochevieja cené con Pita en el Riós,...

El pasado día de nochevieja cené con Pita en el Riós, en un restaurante con adornos de cartón piedra, como una vaca, un burro tirando de un carro con una orangutana montada en él, mientras amamanta a un orangutanito en brazos que mira para un televisor de sesenta pulgadas... y miles de platos para escoger, algunos de ellos demasiado exóticos para el atrevimiento de los comensales.
Cuando pasé a recogerla a su habitación del SPA en Villavieja, si bien ya estaba toda emperifollada, admiré en ella todo un protocolo, recogiendo para su bolso, uno por uno, ordenadamente, los siguientes bártulos: unos binóculos, dos abanicos, unos impertinentes, una polvera, un pañuelo, un frasco de sales aromáticas y hasta una diminuta cajita de plata con pastillas de menta para la tos.
Terminaré amando cada uno de sus gestos y todo su anticuado protocolo de ilustre señora.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Por Dios, Romerales. Mientes más que hablas. ¡Y mira que hablas!
Sólo te faltó explicar con pelos y señales que acabaste tomándote todas las pastillas para la tos de esa cajita de plata.
Tus conquistas son de otro tipo, majadero. Que tus atributos más preciados en otros tiempos ya no se distinguen. ni con los binóculos, ni con los impertinentes. Para tales microorganismos, haría falta un microscopio electrónico.
Chao, locuelo.
Sinor Telesforo, me parece que se pasou sete pobos contando as intimidades da miña ex, claro eu sei que o sinor faio sin mala fe, más seguro que los abanicos seguro que sahún os que le regalei eu fai muntos anos, que por certo un día me dixo por teléfono que aún los guardaba como oro en paño, logo le aprecio unha falta de concentrazahún na sua escrita, pois los impertinentes como el sinor le xama, sahún unhs adornos para las orellas que sempre le ficaron béin. Tambéin le digo que sí o dice pra darme ... (ver texto completo)
No me lo imaginaba yo a usted en esa fecha por estas latitudes, me alegré un montón que se lo pasara tan bien con la Pita Moñuda despidiendo el año, y además nada menos que en ese famoso asador donde tiene un comedor que le llaman el rincon del sibarita, supongo comerían en el mencionado comedor, pues con una dama como la Dña. Pita no era para menos.
Le recuerdo que cuando quiera usted pasarse a escoger el solar estaremos encantados a su disposición.
A sus ordenes mi comandante. Armas sobre el ... (ver texto completo)