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... y de admiración es encontrar en este foro descripciones tan sentimentales de la singular belleza que hay dentro de toda mujer, de sus coqueterías, de sus encantos y de sus deseos de agradarnos, y de sentirse hermosa.
No conozco a la dama en cuestión, pero no creo errar mucho si digo que...
La mujer, cuando necesitamos de su apoyo, siempre están dispuestas a ofrecernos un hombro para descargar nuestras penas, que a veces no son pocas.
Nos ofrecen su sonrisa, aunque por dentro sientan mas tristeza que nosotros.
Nos ofrecen su amor, aunque cuando las engañamos maldigan tener un corazón.
Nos ofrecen sus ojos de mujer, donde se refleja su amor:
amor de madre,
de esposa,
de amiga,
de hija,
de compañera,
amor sin fin.
Lástima que muchas veces queremos asomarnos a las montañas y ver mas lejos de donde sale el Sol, y no sabemos apreciar que la belleza mas bella está dentro de sus ojos.
De caballeros es reconocérselo, "como el Sr. Romerales" y no menos de caballeros es el respeto que sentimos, "como el Sr. 252525" por aquello que un día fue nuestro, y se nos escapó de las manos como un pájaro que empieza a volar y no sabemos donde terminará por hacer su nido.
Pero nos queda el sentimiento, la añoranza, el cariño y el respeto, en aquello que tenemos grande para amar, que es nuestro corazón.
Claro que la sapiencia de Dios es infinita al darnos para disfrutar una sola vida, y negarnos la tortura de saber que hubiese cambiado en ella o en nuestro destino si...
Es hora de desterrar aquellos mitos en los que a la mujer para que tuviesen mas libertad, solamente había que agrandarles la cocina.
También viene al pairo incluir aquello de decirle: " Sin ti estaría perdido", y omitir... (en las Bahamas, por ejemplo.)
Un abrazo
No conozco a la dama en cuestión, pero no creo errar mucho si digo que...
La mujer, cuando necesitamos de su apoyo, siempre están dispuestas a ofrecernos un hombro para descargar nuestras penas, que a veces no son pocas.
Nos ofrecen su sonrisa, aunque por dentro sientan mas tristeza que nosotros.
Nos ofrecen su amor, aunque cuando las engañamos maldigan tener un corazón.
Nos ofrecen sus ojos de mujer, donde se refleja su amor:
amor de madre,
de esposa,
de amiga,
de hija,
de compañera,
amor sin fin.
Lástima que muchas veces queremos asomarnos a las montañas y ver mas lejos de donde sale el Sol, y no sabemos apreciar que la belleza mas bella está dentro de sus ojos.
De caballeros es reconocérselo, "como el Sr. Romerales" y no menos de caballeros es el respeto que sentimos, "como el Sr. 252525" por aquello que un día fue nuestro, y se nos escapó de las manos como un pájaro que empieza a volar y no sabemos donde terminará por hacer su nido.
Pero nos queda el sentimiento, la añoranza, el cariño y el respeto, en aquello que tenemos grande para amar, que es nuestro corazón.
Claro que la sapiencia de Dios es infinita al darnos para disfrutar una sola vida, y negarnos la tortura de saber que hubiese cambiado en ella o en nuestro destino si...
Es hora de desterrar aquellos mitos en los que a la mujer para que tuviesen mas libertad, solamente había que agrandarles la cocina.
También viene al pairo incluir aquello de decirle: " Sin ti estaría perdido", y omitir... (en las Bahamas, por ejemplo.)
Un abrazo