La imagen muestra el cruceiro de Alberguería, alzado sobre la encrucijada donde se atan los caminos de los distintos barrios de la aldea, amén del que conduce hasta el lugar de donde no se vuelve.
Es, sin duda, uno de los lugares con mejores vistas del caserío cerredao y su entorno.
El cruceiro, una sencilla obra de piedra, con airosa columnata estriada y figuras de rústico bulto, data de finales del siglo xix. Efigia por un lado al Crucificado y por el otro a la Virgen (probablemente, una Dolorosa). Hay, además, una pequeña imagen de San Antonio de Padua, uno de los santos de mayor devoción en la parroquia.
En las cuatro caras de su pedestal tiene otras tantas inscripciones, aún legibles (no sin dificultad), una de las cuales da cuenta de quien lo mandó construir y de la fecha («José Ramos Pacios y su mujer Antonia erigieron esta cruz a perpetua memoria y de cristianos luz ano 1897»). Las otras son preces devotas, a modo de jaculatorias, con avisos de piedad para los caminantes.
Desconozco quién fue su autor, aunque Tía Camila sostenía que lo había labrado un hermano (o acaso primo) de su madre, Josefa, canteiro procedente de Pontevedra. De ser así, curiosamente el cruceiro de Alberguería ensartaría caminos familiares décadas antes de que efectivamente se unieran. Nada extraño,por otra parte, en un universo en el que los lazos de sangre están a flor de piel.
El caminante que aquí llegue debe pararse a "tomar folgos", si viniera cansado. Y mientras llena sus ojos de sorbos de luz no usada, acaso se le ocurra meditar sobre lo cercanamente extraño que puede ser en ocasiones este mundo.
Alfredo Ramos
Para más datos sobre el cruceiro y sus inscripciones puede consultarse:
Http://www.readysoft.es/home/cnogueira/espanol/monumentos/cruceros.htm#cruc_albergueria.
Es, sin duda, uno de los lugares con mejores vistas del caserío cerredao y su entorno.
El cruceiro, una sencilla obra de piedra, con airosa columnata estriada y figuras de rústico bulto, data de finales del siglo xix. Efigia por un lado al Crucificado y por el otro a la Virgen (probablemente, una Dolorosa). Hay, además, una pequeña imagen de San Antonio de Padua, uno de los santos de mayor devoción en la parroquia.
En las cuatro caras de su pedestal tiene otras tantas inscripciones, aún legibles (no sin dificultad), una de las cuales da cuenta de quien lo mandó construir y de la fecha («José Ramos Pacios y su mujer Antonia erigieron esta cruz a perpetua memoria y de cristianos luz ano 1897»). Las otras son preces devotas, a modo de jaculatorias, con avisos de piedad para los caminantes.
Desconozco quién fue su autor, aunque Tía Camila sostenía que lo había labrado un hermano (o acaso primo) de su madre, Josefa, canteiro procedente de Pontevedra. De ser así, curiosamente el cruceiro de Alberguería ensartaría caminos familiares décadas antes de que efectivamente se unieran. Nada extraño,por otra parte, en un universo en el que los lazos de sangre están a flor de piel.
El caminante que aquí llegue debe pararse a "tomar folgos", si viniera cansado. Y mientras llena sus ojos de sorbos de luz no usada, acaso se le ocurra meditar sobre lo cercanamente extraño que puede ser en ocasiones este mundo.
Alfredo Ramos
Para más datos sobre el cruceiro y sus inscripciones puede consultarse:
Http://www.readysoft.es/home/cnogueira/espanol/monumentos/cruceros.htm#cruc_albergueria.