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Esta es una vista del interior de la iglesia del monasterio de San Pedro de Rocas.
La parte antigua de la iglesia (a la izquierda de la fotografía), está compuesta por tres capillas excavadas en la roca. Estas capillas cuentan con luz natural, a través de una abertura que desde su techo llega a la cima de la montaña.
Se aprecian en primer término las sepulturas antropomorfas de la época visigótica, escavadas a la entrada de la iglesia antigua.
El monasterio, fundado en el año 573, según consta en una lápida que se conserva en el Museo Arqueológico Provincial de Orense, se emplaza en la estribaciones meridionales de Cabeza de Meda, no muy lejos del castro y castillo de Litoria; en un paraje de interesantes estructuras graníticas salpicadas entre la vegetación.
Por la parte posterior del cenobio baja un antiguo camino, seguramente de época prerromana, que desde el castro de Litoria conduce al castro de Armeá.
Antonio G. Rodicio (arodicio@usc.es).
La parte antigua de la iglesia (a la izquierda de la fotografía), está compuesta por tres capillas excavadas en la roca. Estas capillas cuentan con luz natural, a través de una abertura que desde su techo llega a la cima de la montaña.
Se aprecian en primer término las sepulturas antropomorfas de la época visigótica, escavadas a la entrada de la iglesia antigua.
El monasterio, fundado en el año 573, según consta en una lápida que se conserva en el Museo Arqueológico Provincial de Orense, se emplaza en la estribaciones meridionales de Cabeza de Meda, no muy lejos del castro y castillo de Litoria; en un paraje de interesantes estructuras graníticas salpicadas entre la vegetación.
Por la parte posterior del cenobio baja un antiguo camino, seguramente de época prerromana, que desde el castro de Litoria conduce al castro de Armeá.
Antonio G. Rodicio (arodicio@usc.es).