La
Picota y El Outeiro, las dos
calles de mis raices.A mi, viendo estas
fotos, tambièno me asoman las làgrimas, como a esos emigrantes argentinos, por el recuerdo algo lejano ya, de una
feliz adolescencia.
Gracias
Laza por haber formado parte de un entrañable episodio de mi
historia personal.