Se conserva parte de sus altos muros y algunas garitas. Junto a ella se encuentra una
fuente. El 9 de mayo de 2014 el
ayuntamiento de Monterrey autorizó las obras en el
castillo para convertirlo en un
Parador de Turismo. La Junta de
Galicia construyó el
hotel a pesar del informe en contra del Consello da Cultura Galega pero en 2016 el Tribunal Supremo declaró ilegales las obras.