Soy Eva, hija de Juanito y de Josefa, hermana de Silvia. Como bien sabréis hace años que no voy al pueblo. Muchos os preguntaréis a qué se debe esta decisión. La excusa no son los estudios ni mis viajes por toda Europa sino la falta de interés. Desde que murieron mis abuelos, como muy bien ha comentado mi hermano Silvia, no me apetece ir al pueblo. Soy sincera. También he sido presa de una enfermedad que mucha gente del pueblo nunca llegará a entender: la ansiedad. Hago vida normal, sólo tomo medicación de vez en cuando. Ya la he conseguido dejar casi por completo. <P>Actualmente vivo en Alemania. He estudiado y trabajado mucho. He estudiado traducción e interpretación de inglés, alemán, castellano y catalán en tres universidades europeas. Pronto me prepararé para hacer un posgrado o un doctorado. <P>Muchos sabréis que siempre he escrito poemas sobre el pueblo. Os los enviaré todos una vez que esté en Barcelona. No sé cuando regresaré. De momento estoy en Alemania, en Colonia, una ciudad magnífica y genial. <P>En octubre me quiero ir a la China. Ya sé que soy la rara del pueblo. Siempre me he sentido así desde pequeña. Esto se debe a la gran diferencia cultural que existe entre la gente del pueblo y yo, incluso entre la gente española y mi mentalidad. Soy nudista, no me cubro. Mis mejores amigos son gays. Me encanta el buen sexo. Me acostaría con veinte chicos en una noche. No tendría problemas. <P>Seguro que si alguien lee esto se quedará boquiabierto. Aparte de tener mucha cultura soy una persona muy abierta (tanto de piernas como de cabeza). Me encanta la lectura, un buen periódico, adoro viajar, visitar un buen museo. Me encanta estar con la familia, con mis amigos y conmigo misma. <P>Actualmente me he echado un noviete. Mi relación con Markus se fue al carajo, pero no importa, la vida sigue. Mi novio no os digo de donde es porque sino me matáis. Es marroquí. Sí, no ocurre nada. Eso de luchas entre moros y cristianos ya debe desaparecer de vuestras mentes. Ya os lo he dicho soy el bicho del San Mamede. <P>Hasta este punto sólo he hablado de mi vida actual. No quiero negar que me encanta hablar en gallego, que amo el pueblo y su tranquilidad y que esas son mis raíces. Como bien mi hermana ha narrado y relatado ; los mejores momentos de nuestra infancia se remontan a los meses de verano y a las navidades. Eramos niños. Las cosas desde la infancia se ven siempre muy bonitas pero a medida que vamos creciendo nos vamos dando cuenta de la realidad. Mi abuelo era genial con los nietos pero maltrataba a su esposa y maltrató también a sus hijos. Esto es algo que ocurre con frecuencia en Correchouso y es una crítica constructiva que hago. Odio la represión, los malos tratos y la falta de tacto. Ya va siendo hora de que los hijos de inmigrantes luchemos contra esta falta de cultura ; contra el vacío cultural que hay en el pueblo. Sin esta lucha no podremos seguir adelante ; por lo menos yo me niego a ir al pueblo hasta que este tema no se debata, ya que muchos de los problemas de mi niñez se los debo a las habladurías de la gente. <P>Mentiría, siempre me he sentido aparte; tanto en Correchouso como en Rebordechao. No he encontrado mi espacio y jamás lo encontraré porque soy diferente al resto. Yo he aceptado a todo el mundo pero no todo el mundo ha podido aceptarme a mí. <P>Mi pueblo es hermoso, es genial. Ya os lo digo. Correchouso es una maravilla para estar una semana pero no para más tiempo. Mi nexo de unión ya no es el pueblo y puedo asegurar que a muchos miembros de la familia no los considero más que conocidos por el simple hecho de que hace mucho tiempo que no sé de ellos. <P>Yo os propongo a todos un reencuentro realista, un reencuentro verdadero; sin falsedades, calumnias o rollos patateros. Dejémonos del puñetero cura de Correchouso que es el primer inculto que hay. Aparte de las escrituras creo que poco ha leído este señor que se cree a sí mismo un Dios por tener un poquito más de cultura que el resto. Mentira podrida; ahora que lo pienso fríamente y debido a mi experiencia en los últimos años; este personaje es todo un personaje. No lo quiero ver ni en pintura. Como se dice en alemán: Lecke mich an Arsch. <P>Echo de menos a mi abuelo. Os pido a las gentes del pueblo que le llevéis flores de mi parte. Es la persona del pueblo a la que más he querido. Abuelito Santiago, qué dolor fue el que nos dejaras. Con tu muerte y con la de la abuela se terminaron nuestras vacaciones hermosas pero a la vez crueles. <P>Mi hermana habla muy bien del pueblo, yo soy sincera. En el pueblo ha habido y seguirá existiendo siempre mucha crueldad. De eso es de lo que me he alejado y de lo que me alejaré siempre. Yo no soy cruel pero en el pueblo los elementos antagónicos bien versus mal luchan constantemente. Se aferran al vacío. Yo os propongo una discusión filosófica. Qué es el bien; qué es el mal. <P>Termino mi discurso con unas palabras que dijo Santa Teresa de Jesús (que conste que soy antireligión). Es un oxímaron, una figura retórica que subyace constantemente en contradicción. Estas palabras os ayudarán a entender como me siento yo en Correchouso y alrededores: <P>Vivo sin vivir en mí/que tan alta vida espero/que muero porque no muero <P>Besos a todos mis primos. Si queréis llamadme 00491625289531 o escribidme un email a evagn15@mailcity.com <P>Por cierto, la gente que me odie que no se moleste en ponerse en contacto conmigo. Los falsos que se queden en su casa, los sinceros pueden hablar conmigo <P>Muchos recuerdos desde Colonia. Intentaré ir al pueblo este año si tengo tiempo. Primero he de ir a la China en octubre. Si alguno del pueblo tiene interés en ir a la China conmigo que me envíe un email. Lo digo en serio. Me voy a China.