Pese a haber sido declarado
Monumento Histórico
Artístico Nacional en el año 1931, el yacimiento sufrió en estos años la ampliación del trazado de la
carretera de subida y una agresiva reforestación del
monte que deterioró gravemente el yacimiento. Desde el año 1933, fecha de la última campaña de Mergelina, los restos puestos al descubierto sufrieron las consecuencias de su abandono llenándose de vegetación. Este período de abandono duró hasta el año 1979.