Esta etapa de abandono finalizó en el año 1979, cuando Alfredo García Alén dirigió trabajos de limpieza y consolidación de las estructuras más próximas a la
carretera, promovidos por el Ministerio de Cultura. En el año 1983, con la colaboración económica de la Junta de
Galicia y el
Ayuntamiento de La Guardia, el arqueólogo Antonio de la Peña
Santos dirigió un equipo del
Museo de
Pontevedra iniciando un nuevo período de excavaciones sistemáticas.