Durante el primer milenio a. C. se consolidó la Edad del Hierro que tendría como manifestación más determinante la cultura castreña. Sin duda, esta fue la etapa de mayor esplendor en la
historia de La Guardia y de esto dan muestras multitud de restos, sobre todo en la abundancia de castros:
Santa Tecla, A Forca, O Castro y A Bandeira.