La morriña ha llegado a mi espiritu, pero algo ha quedado atenuada, por la simpatia de los foraneos que han visitado la aldea en la que yo he tenido la inmesa suerte de nacer, de ir a su pequeña
escuela, de bañarme en sus hermosas
playas, hasta de escribir en un periodico ya desaparecido sobre "
ALDáN Y SUS COSAS".
Aldan, siempre te conservaré en mi memoria y en mis recuerdos. Un aldanés (De Piñeiro).