El castro de Altamira podría ser uno más de los muchos que se encuentran en este ayuntamiento, pero el hecho de tenerse encontrado en su suelo uno de los mayores yacimientos de piezas de bronce de la época romana hacen de él uno de los más atractivos. Diferentes piezas líticas del Paleolítico y del Neolítico aparecieron también en la zona conocida como couto de Altamira, hay hallazgos de bronces romanos, fragmentos de estatuas, una Ara dedicada a Mercurio e incluso una cabeza de perro, en un proceso de estratificación de culturas que se produjo a raíz de la conquista y romanización de nuestra zona. Así mismo podemos hacer mención de hallazgos importantes en el castro de Bocas en San Xosé de Ribarteme dentro de la misma línea con el anterior, y en el Coto do Conde en San Pedro de Batalláns, donde hay constancia de casas circulares semejantes a las que aparecen en el monte de Santa Tegra en A Guarda.