En el s. IX,
Cambados sufría los ataques de vikingos y normandos debido a su situación privilegiada en el centro de la comarca del Salnés, con una costa baja, arenosa y con
aguas tranquilas, que reúnen unas excelentes cualidades para la navegación. Esta lucha de la población le valió para que en el año 1170 Fernando II, Rey de
León, le concediese el título de “Muy Leal Villa” iniciándose entonces un período de esplendor, que queda reflejado en la multitud de pazos existentes en el municipio pertenecientes principalmente al s. XVII y al s. XVIII.