CHAPELA: A CHAPELA...

A CHAPELA
Chapela marinera, eres como una concha de plata, que baja desde la montaña, a remojar su esmeralda, en esa Playa encantada, que guarda tantos recuerdos. Allí las sonrientes gaviotas, se pasean por la arena dorada, con esas plumas tan
blancas, buscando la compañía de sus amigos del alma.
Chapela, jardín precioso, de Redondela tan abandonada, que mientras ella progresa a tí no te toca nada. Chapela de verde paisaje, que se refleja en el agua, y llevas destellos de cielo entre la noche y el alba.
Entre Chapela y el mar, hay un espejo de plata, donde se mira la luna, cuando al cielo le hace guardia. Chapela es un mirador, donde se asoman por la mañana, esas bellas sirenas que cantan por la mañana. Lleva Chapela en el corazón, una sola alma,, un mismo sentimiento y una sola palabra, que canta al mar encantada, para ensalzar su mar y su verde montaaña.
ANSELMO EL CARTERO