Interior y exterior del claustro de la catedral de Santa María, TUI
El origen de la palabra “claustro” debemos buscarlo en el vocablo latino “claudere” cuyo significado es “cerrar”. Y esta era la función primitiva de los claustros: espacios cerrados en torno a los cuales se disponían una serie de dependencias de variada índole: tales como administrativas, funerarias, de meditación…