El
edificio se sitúa en pleno centro urbano, junto al pazo que lleva el mismo nombre, el Pazo Vista Alegre. Ambas construcciones, el pazo y el
convento, forman un conjunto arquitectónico de gran valor, que ha sido declarado
Monumento Histórico-
Artístico. La edificación del pazo es de fecha anterior a la del convento. El primero fue construido en el siglo XVI, mientras que el convento se levantó en pleno siglo XVII, por deseo de Fernando de Andrade Soutomaior y Caamaño.