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01 diciembre 2010
GRACIAS PITILLAS
Publicado por Silvia Rozas a las 14:30 Sección canonización, Educación, madre Cándida
El pasado día 28, la localidad de Pitillas organizó una serie de actos para conmemorar la reciente canonización de la Madre Cándida Mª de Jesús, fundadora de las Hijas de Jesús. La propia Madre Cándida había fundado, en 1909, junto al Obispo pitillés Don José Cadena y Eleta, el Colegio San José de Pitillas, que se mantuvo abierto hasta 1962. En esta fecha la congregación se trasladó al pamplonés Barrio de la Chantrea, donde continúa en la actualidad su labor educativa y pastoral. El recuerdo que dejó el Colegio San José en Pitillas y su comarca fue profundísimo como lo atestigua que, cincuenta años después, siga viva la llama de las Jesuitinas. Y por supuesto la llama de las dos docenas de hijas de Pitillas que sirvieron a la Iglesia desde esta congregación.
Una emotiva eucaristía dio inicio a la jornada en la iglesia parroquial. Pueblo y autoridades de Pitillas, encabezados por su Sr. Alcalde, más gentes venidas de Beire, Murillo el Cuende y otras localidades navarras abarrotaron el templo. Acudieron religiosas jesuitinas procedentes de Pamplona, Andoain, Valladolid y Vigo, entre ellas las pitillesas Teresa Alli y Marianela Sagardoy o las tudelanas Natividad Castellanos y Mª Jesús Navarro. Y especialmente emotiva fue la presencia de la Madre Carmen del Val, que a pesar de sus muchos años acudió desde Valladolid. Ella fue profesora en Pitillas muchos años y su nombre es celebrado en la familia de las Jesuitinas ya que en su persona se obró el milagro, reconocido por la ciencia y la Iglesia, que sirvió para canonizar a la Madre Cándida. Un aperitivo, que incluía una exposición de fotos antiguas del colegio, puso la tertulia y el reencuentro emocionado de muchas gentes. Y para terminar la correspondiente comida fraternal.
Uno, que ha estado en muchas celebraciones por la canonización de la Madre Cándida, en Roma, en su localidad natal de Andoain, o en la Catedral de Pamplona, ha de reconocer que lo vivido en Pitillas fue especial, íntimo y profundo porque nació desde el cariño y el agradecimiento de las antiguas alumnas de Pitillas. Por ello hay que decir GRACIAS PITILLAS, gracias por el recuerdo emocionado, gracias por el cariño que destilaban vuestras personas y gestos, gracias por el recibimiento y la cercanía, gracias por abrirnos vuestro pueblo y vuestros corazones.
Todos los que formamos la familia de las jesuitinas, y que estuvimos en Pitillas, salimos con el corazón encogido por todo lo que allí recibimos. Y gracias especiales al Padre Nacho y al grupo parroquial que se encargó de organizar los actos. Estoy seguro que será difícil que otra localidad viva algo similar a lo de Pitillas. Pero como le comentaba yo a una religiosa de Valladolid el pasado Domingo, ¡cuando los navarros ponen el corazón…!
José Mª Muruzábal
Ex director Colegio Jesuitinas Pamplona
GRACIAS PITILLAS
Publicado por Silvia Rozas a las 14:30 Sección canonización, Educación, madre Cándida
El pasado día 28, la localidad de Pitillas organizó una serie de actos para conmemorar la reciente canonización de la Madre Cándida Mª de Jesús, fundadora de las Hijas de Jesús. La propia Madre Cándida había fundado, en 1909, junto al Obispo pitillés Don José Cadena y Eleta, el Colegio San José de Pitillas, que se mantuvo abierto hasta 1962. En esta fecha la congregación se trasladó al pamplonés Barrio de la Chantrea, donde continúa en la actualidad su labor educativa y pastoral. El recuerdo que dejó el Colegio San José en Pitillas y su comarca fue profundísimo como lo atestigua que, cincuenta años después, siga viva la llama de las Jesuitinas. Y por supuesto la llama de las dos docenas de hijas de Pitillas que sirvieron a la Iglesia desde esta congregación.
Una emotiva eucaristía dio inicio a la jornada en la iglesia parroquial. Pueblo y autoridades de Pitillas, encabezados por su Sr. Alcalde, más gentes venidas de Beire, Murillo el Cuende y otras localidades navarras abarrotaron el templo. Acudieron religiosas jesuitinas procedentes de Pamplona, Andoain, Valladolid y Vigo, entre ellas las pitillesas Teresa Alli y Marianela Sagardoy o las tudelanas Natividad Castellanos y Mª Jesús Navarro. Y especialmente emotiva fue la presencia de la Madre Carmen del Val, que a pesar de sus muchos años acudió desde Valladolid. Ella fue profesora en Pitillas muchos años y su nombre es celebrado en la familia de las Jesuitinas ya que en su persona se obró el milagro, reconocido por la ciencia y la Iglesia, que sirvió para canonizar a la Madre Cándida. Un aperitivo, que incluía una exposición de fotos antiguas del colegio, puso la tertulia y el reencuentro emocionado de muchas gentes. Y para terminar la correspondiente comida fraternal.
Uno, que ha estado en muchas celebraciones por la canonización de la Madre Cándida, en Roma, en su localidad natal de Andoain, o en la Catedral de Pamplona, ha de reconocer que lo vivido en Pitillas fue especial, íntimo y profundo porque nació desde el cariño y el agradecimiento de las antiguas alumnas de Pitillas. Por ello hay que decir GRACIAS PITILLAS, gracias por el recuerdo emocionado, gracias por el cariño que destilaban vuestras personas y gestos, gracias por el recibimiento y la cercanía, gracias por abrirnos vuestro pueblo y vuestros corazones.
Todos los que formamos la familia de las jesuitinas, y que estuvimos en Pitillas, salimos con el corazón encogido por todo lo que allí recibimos. Y gracias especiales al Padre Nacho y al grupo parroquial que se encargó de organizar los actos. Estoy seguro que será difícil que otra localidad viva algo similar a lo de Pitillas. Pero como le comentaba yo a una religiosa de Valladolid el pasado Domingo, ¡cuando los navarros ponen el corazón…!
José Mª Muruzábal
Ex director Colegio Jesuitinas Pamplona
