MIL AÑOS CONTEMPLAN EL PASO DE PEREGRINOS A SANTIAGO SOBRE LAS LOSAS DE ESTE BELLO
PUENTE ROMANICO SOBRE EL
RIO ARGA. En
Puente la Reina confluyan las dos rutas occidentales francesas, procedentes de Roncesvalles y de Somport.
Es por eso que la
historia de Puente La Reina, Gares, esta íntimamente asociada a ese puente construido en el siglo XI para facilitar el paso de los peregrinos sobre el caudaloso rio Arga. Los caballeros templarios estuvieron largos años presentes en esta villa. La
calle Mayor, que recibe al peregrino, se prolonga sobre los siete ojos de este puente románico.
Por ser enclave crucial en el centro del Reino de
Navarra, las guerras carlistas, la primera y la tercera, tuvieron como escenario de varias batallas este territorio, de modo que hasta hace poco se ha encontrado munición de aquella época en los
campos de esta zona.
Dado que la Ruta Jacobea reseca mucho el gaznate, ahí se crían los mejores caldos de vino clarete, gracias a esas cepas acariciadas por el tibio sol y mirando siempre al sur que parece anunciarnos el ambiente mediterráneo. Unas botellitas de clarete adquiridas en cualquier
tienda de esas viejas
calles seguro que no decepcionaran al catador mas exigente.
La tarde cálida de
primavera recibe a los últimos peregrinos de la jornada, que desfilan entre cansados y alegres por ese retazo de historia que es el Puente de Gares.