Las próximas fiestas de la villa de Ujué
Esta antigua y laboriosa villa Navarra se dispone a celebrar sus tradicionales fiestas, que tendrán lugar el 8 del corriente mes de Septiembre y en días sucesivos.
Las fiestas do Ujué son sencillas; pero en esa misma sencillez hay precisamente tal encanto que atrae al forastero y lo envuelve en su expansión casi ingenua. De aquí que cada año estas fiestas se vean muy concurridas y animadas, y ya en el presente el pueblo todo se prepara al objeto de disfrutar de los actos que ha organizado su digno Ayuntamiento y de proporcionar a cuantos le visiten estancia feliz cuyo recuerdo sea imborrable Y sobre todo, como villa eminentemente cristiana, dará la mayor brillantez a las funciones religiosas, ya que sus honrados vecinos guardan su más íntimo entusiasmo y sus más caros afectos para su Virgen y Patrona la milagrosa Santa María la Real.
Ya la víspera ¿en la llegada de los excelentes músicos do Pamplona que dirige don Juan Gil, comienza la alegría y el bullicio; y en la Real Basílica, después del Rosario, se canta una solemne Salve por un coro de mozos.
Día de la Virgen, a las nueve de la mañana, marcha el Ayuntamiento en corporación, acompañado de la charanga contratada, a la función principal, en la que predica un R. P. Capuchino de la Residencia de la capital, y después vuelve la comitiva a la Casa Consistorial, de nuevo seguida por los «ujuetarras” y de cuantos huéspedes disfrutan de la hidalguía y cariño que a manos llenas derraman estos riberanos amables y complacientes.
El regocijo no decae en todos los días de las fiestas. pues aquí también las cuadrillas son de bronce, y tan pronto se las ve en la plaza como en sus reuniones, dando muestras de un humor envidiable y de una resistencia soberana.
¡Divertirse mucho!, pues un pueblo de tal laboriosidad y honradez bien merece la tregua de sus fiestas en compensación del trabajo tenaz y duro de todo el año.
Baldomero Barón Rada
Diario de Navarra, 5 de septiembre de 1926
Esta antigua y laboriosa villa Navarra se dispone a celebrar sus tradicionales fiestas, que tendrán lugar el 8 del corriente mes de Septiembre y en días sucesivos.
Las fiestas do Ujué son sencillas; pero en esa misma sencillez hay precisamente tal encanto que atrae al forastero y lo envuelve en su expansión casi ingenua. De aquí que cada año estas fiestas se vean muy concurridas y animadas, y ya en el presente el pueblo todo se prepara al objeto de disfrutar de los actos que ha organizado su digno Ayuntamiento y de proporcionar a cuantos le visiten estancia feliz cuyo recuerdo sea imborrable Y sobre todo, como villa eminentemente cristiana, dará la mayor brillantez a las funciones religiosas, ya que sus honrados vecinos guardan su más íntimo entusiasmo y sus más caros afectos para su Virgen y Patrona la milagrosa Santa María la Real.
Ya la víspera ¿en la llegada de los excelentes músicos do Pamplona que dirige don Juan Gil, comienza la alegría y el bullicio; y en la Real Basílica, después del Rosario, se canta una solemne Salve por un coro de mozos.
Día de la Virgen, a las nueve de la mañana, marcha el Ayuntamiento en corporación, acompañado de la charanga contratada, a la función principal, en la que predica un R. P. Capuchino de la Residencia de la capital, y después vuelve la comitiva a la Casa Consistorial, de nuevo seguida por los «ujuetarras” y de cuantos huéspedes disfrutan de la hidalguía y cariño que a manos llenas derraman estos riberanos amables y complacientes.
El regocijo no decae en todos los días de las fiestas. pues aquí también las cuadrillas son de bronce, y tan pronto se las ve en la plaza como en sus reuniones, dando muestras de un humor envidiable y de una resistencia soberana.
¡Divertirse mucho!, pues un pueblo de tal laboriosidad y honradez bien merece la tregua de sus fiestas en compensación del trabajo tenaz y duro de todo el año.
Baldomero Barón Rada
Diario de Navarra, 5 de septiembre de 1926
