Aquí tenemos al Rey Melchor que a este poco le tuvieron que retocar por que iba el primero y ni el polvo le toco, así que cepillarle un poco la capa y la barba y se quedo como un pincel, este era muy simpático al menos con nosotros se porto como si nos conoceríamos de siempre jajaja, y por eso le tomamos muy pronto esa confianza que el nos ofreció, al principio estuvimos un poco comedidos en nuestras palabras pero no se nos escapo una palabra mas alta que otra por el respeto que nos infundieron,...