Buenas tardes Antonio, Claro que tienen que ser agradables estos eventos, por que os juntáis una serie de personas que aunque con todos no tengas la misma afinidad sabes que estáis tirando del mismo carro puesto que todos tenéis las mismas ideas de lo que estáis haciendo, aunque por tener menos tiempo juntos no tenéis la misma confianza, pero pienso que al final de esas reuniones casi se podría decir que todos sois uno, de la misma forma que sois los que estáis todo el año, gracias por estas letrillas, pero me haces recordar una cosa que decía un amigo mio, (esto es cierto pero no hay un Dios que me lo crea) jajaja pero a ti si se te puede creer,
un abrazo y hasta otro rato
un abrazo y hasta otro rato
TEO, no se cuantos años tendría -posiblemente entre ocho y diez- habíamos dicho que una niña, poco mayor que nosotros, estaba un poco gorda. No tardaron en irse del pueblo, creo que a Barcelona. Dijeron que era de un señor ganadero, otros de alguien casado, incluso se hablo del padre. Ya sabes que cosas de estas han pasado, pasan y seguiran pasando. Crías de 13, 14 o 15 años que quedan embarazadas y sin que se sepa de quién, o mejor dicho; sin que digan de quien. El dinero calla muchas bocas. Yo solo recuerdo algunos momentos, pero con mucha niebla. Esa es la historia amigo TEO. Tú sabrás algunas de similares características. Un abrazo
Fijate tu Antonio todo el mal que se le puede hacer a una persona con un comentario, con un comentario que era verdad pero yo me pregunto, ¿que seria de esa criatura después de todo ese devenir que llevaría en su vida? por que mira que vida llevaría la madre pero ¿que vida llevaría la criatura? cuanto daño pueden hacer las malas lenguas, pero veo que fue una actitud muy sabia la que tuvieron los padres marchar donde nadie sabría nada de ellos nunca mas, es una pena que algún desalmado haría una barbaridad de esa índole pero de todo se cría en la viña del señor, Antonio yo ya había oído esa frase pero lo has bordado, (¿Cuantas bocas tapa el dinero?) ojala no volvería a ocurrir nunca mas esto, Antonio te doy mi palabra de que no he oido nunca estos casos en mi pueblo
un abrazo
un abrazo