El Domingo a la mañana después del almuerzo que se hizo para los participantes de la marcha, pusieron en la plaza este castillo inchable para todos los niños, ellos también tenían que participar de la fiesta que se hizo, y que mejor que esto para que todos los niños allí asistentes disfrutarían de lo que quedaba de día con esta diversión tan arraigada en nuestro pueblo, raro seria que dejaría de pasar por el castillo ningún niño del pueblo y algún visitante, por que en mejor día no lo podían haber puesto, me refiero al fresquito que hacia por que normalmente cuando ponen inchables los niños no paran ni un segundo y se pegan cada sudada de órdago,
Teo aunque haga frio, los niños ni lo notan, ¡no paran! aqui cada poco los hay, y les encantan las colchonetas jajaja, ¡son niños, hay que dejarlos que disfruten!
Berta aquí pasa lo mismo lo mismo en el castillo inchable que en la cama elástica que en cualquier cosa que pongan están que no paran, así que sudan como una cosa mala pero no se cansan nunca y eso es lo bueno que estén jugando a tope y que no digan que no nunca,