Hasta que no llego la mayoría de las motos estaban cada una donde querían, y los dueños comentando sus características, y la forma en que iban a pasar esos dos días de concentración, solo se veían corrillos de moteros y algún curioso viendo semejantes motos, sintiendo envidia sana como yo mismo aunque me sea imposible andar en esos aparatos, me hubiese gustado que fuese mía por que esas maravillas no las tiene cualquiera, pero en fin cada uno lo que puede, pero lo que si es cierto que esos aparatos dieron en la mañana del sábado una alegría especial por que habría muchas personas que no hayan visto semejantes motos, y seguro que ya se les quedaría grabado en la retina cada parte de que se compone un juguete de esos juguete para algunos por que como digo todos no se pueden permitir esos lujos y mas según la que esta cayendo,