El plumaje de la golondrina y el cuervo
La golondrina y el cuervo discutían acerca de su plumaje. El cuervo terminó la discusión alegando:
- Tus plumas serán muy bonitas en el
verano, pero las mías me cobijan contra el
invierno.
Lo que sólo sirve para presumir, no es valioso en realidad.