Cuando se rompió el barco, el cinismo y la caradura de esta gente se puso de manifiesto sin trampa ni cartón y, todos a una, como orfeón bien entrenado, dijeron que la culpa era de la gente, de la gente sencilla, normal, de las que no los habían votado a ellos ni los votaran nunca porque, los conocen bien y han sufrido en sus propias carnes o en la de ascendentes o descendentes, amigos o conocidos, los efectos de sus “bondades”; como, por ejemplo, aquellos energúmenos gallegos que ladraban por todas... Lo siento por el Bilbo, pero así está la cosa ahora.
Ya se esparcen por los suelos
cual harapos deshilachados
los pendones de las Castillas,
pues ineptos capitanes
afrontaron el evento
con más ínsulas que talentos
El quinto de los Felipes... COMO AQUÍ HAY MUCHOS ALMENDRALENSES, IGUAL ALGUNO LEE ESTO, ASÍ, QUE PARA ELLOS Y ELLAS COMO SE DICE AHORA Y, EN ESPECIAL PARA EL HOGAR EXTREMEÑO LOCAL, CON TODO MI AFECTO:
¿Será capaz Isidro el labrador de hacernos olvidar aunque sólo por hoy las cuitas que nos agobian?
Depende, habrá a quien si y quien no, como siempre. Habrá quien coja la túrdiga ya de mañana temprano y estará todo el día en ese limbo que ahora al parecer ya no existe, pero al fin y al cabo ausente. Ausente y muy alejado... Recia moza, para batallas, la que se celebró en La Albuera, que como sabes es un enclave agrícola compuesto por unos mil ochocientos vecinos. Situado donde se bifurca la carretera nacional, tirando un ramal en dirección Huelva pasando por el almendral sin almendros y, el otro, dirección Sevilla.
Para no equivocarte, mirando al sur, verás las Sierras de Monsalud, Santa María y el Monte Jacho, vas bien para Huelva y para Jerez, el los Caballeros. Si quieres ir a Sevilla, tira por el ramal de la izquierda,... Mi sierra, Patxi, no es como esas que hay donde tu vives. Las tuyas son altas sí, verdes y frondosas, igual que los valles. Mi sierra es arisca, áspera, tan severa y adusta que no da facilidades ni a sus incondicionales amantes. Mi sierra es Monsalud y tiene el color moreno del encinar matizado por el verde de las torviscas, los jaguarzos, carrascas y los espinos negros. Por la parte que mira al norte, ni se ven las veredas que hacen los animales silvestres o asilvestrados en su ir y venir diarios....