Mi sierra, Patxi, no es como esas que hay donde tu vives. Las tuyas son altas sí, verdes y frondosas, igual que los valles. Mi sierra es arisca, áspera, tan severa y adusta que no da facilidades ni a sus incondicionales amantes. Mi sierra es Monsalud y tiene el color moreno del encinar matizado por el verde de las torviscas, los jaguarzos, carrascas y los espinos negros. Por la parte que mira al norte, ni se ven las veredas que hacen los animales silvestres o asilvestrados en su ir y venir diarios. ... (ver texto completo)