Con influencias picassianas -en cuanto al tema-, es una preciosa escultura de Néstor Basterretxea contra la violencia, -por la Paz-, de 1988, que el ayuntamiento de San Sebastián colocó entonces en lo que hoy, más o menos, es la terraza del Kursal -esquina junto alrío y el mar-. Después de unos años trasladada a Anoeta -delante del nuevo estadio de fútbol-, el ayuntamiento la devolvió a la orilla de La Zurriola, pero en el barrio de Sagüés -en la zona de Monpás"-.