SE FUE BUSCANDO OTRA FORMA DE VIDA
Cuando en la vida vamos pensando
los aires viejos que son cultura,
hay muchos días que vas soñando
que no sea en balde tanta locura.
Fueron trabajos de los que marcan
entre calores de aquellos hornos,
las vibraciones nunca se embarcan
y sueñas siempre con los contornos.
Se fue buscando con aventuras
los grises pasos de aquel futuro,
dicen que existen muchas locuras
aunque el mañana le pinten duro.
Por Baracaldo tuvo promesas
de ver sus pasos comprometidos,
la vida a veces marca regresos
y algunos sueños son afligidos.
En su maleta siempre cargada
con esperanzas de sensaciones,
viendo su meta que disecada
solo consigue ver negaciones.
En Baracaldo cargo ilusiones
con la templanza que da la vida,
hay muchas veces que hay maldiciones
cuando tu mente se ve perdida.
Con su maleta siempre cargada
de sombras viejas de las penumbras,
tiene su ritmo de ver centrada
algunas penas que les deslumbran.
En Baracaldo tuvo cariño
de ciertas manos que acariciaba,
echaba en falta ser ese niño
que en la distancia nunca lloraba.
Se pasan años sin darse cuenta
y ciertos nombres se van borrando,
hay soledades que alguien se inventa
cuando las penas llegan dañando.
G X Cantalapiedra.
27 – 6 – 2020.
Cuando en la vida vamos pensando
los aires viejos que son cultura,
hay muchos días que vas soñando
que no sea en balde tanta locura.
Fueron trabajos de los que marcan
entre calores de aquellos hornos,
las vibraciones nunca se embarcan
y sueñas siempre con los contornos.
Se fue buscando con aventuras
los grises pasos de aquel futuro,
dicen que existen muchas locuras
aunque el mañana le pinten duro.
Por Baracaldo tuvo promesas
de ver sus pasos comprometidos,
la vida a veces marca regresos
y algunos sueños son afligidos.
En su maleta siempre cargada
con esperanzas de sensaciones,
viendo su meta que disecada
solo consigue ver negaciones.
En Baracaldo cargo ilusiones
con la templanza que da la vida,
hay muchas veces que hay maldiciones
cuando tu mente se ve perdida.
Con su maleta siempre cargada
de sombras viejas de las penumbras,
tiene su ritmo de ver centrada
algunas penas que les deslumbran.
En Baracaldo tuvo cariño
de ciertas manos que acariciaba,
echaba en falta ser ese niño
que en la distancia nunca lloraba.
Se pasan años sin darse cuenta
y ciertos nombres se van borrando,
hay soledades que alguien se inventa
cuando las penas llegan dañando.
G X Cantalapiedra.
27 – 6 – 2020.