HAY RECUERDOS BIEN GUARDADOS
No lo dudes, me dijo un vasco muy serio,
en Baracaldo se sueña con el trabajo y a veces vives misterio.
Quise borrar muchas huellas, más fue trabajo imposible,
fui mirando a las estrellas en un camino invisible.
En una tasca gritando, sentí voces castellanas,
luego me quede pensando en muchas tardes mundanas.
Una tarde con nostalgia me marche buscando flores,
de pronto noté la magia que tienen ciertos amores.
En Baracaldo se entiende lo grande de nacer libre,
y su gente los comprende y sobre aquello se escribe.
Soñar no cuesta dinero me decían de chiquillo,
luego sin ser embustero escuché cantar al grillo.
“LA LIBERTAD” de una tierra que sabe de soluciones,
que detrás dejo esa guerra que siempre da maldiciones.
Entre los hornos de fuego Baracaldo son razones,
en el pasado despliego muchas buenas intenciones.
Cuando la vida te deja en caminos sin futuro,
tienes que tener constancia y tratar de hacerte el duro.
Abrazando Baracaldo el amor se hace posible,
no presumas tener saldo ni querer ser invisible.
Sentir la voz de tu tierra es un camino pisado,
alguien pensó que se entierra un trozo casi olvidado.
Baracaldo con respeto por sus muchos inmigrados,
que fueron pasando el veto entre sueños terminados.
No vale gritar al viento en las frías madrugadas,
ni pregonar sufrimiento en preciosas alboradas.
Vivir alegre y contento teniendo al lado la Ría,
“LA LIBERTAD” te da aliento para gozar su alegría.
G X Cantalapiedra.
7 – 7 – 2020.
No lo dudes, me dijo un vasco muy serio,
en Baracaldo se sueña con el trabajo y a veces vives misterio.
Quise borrar muchas huellas, más fue trabajo imposible,
fui mirando a las estrellas en un camino invisible.
En una tasca gritando, sentí voces castellanas,
luego me quede pensando en muchas tardes mundanas.
Una tarde con nostalgia me marche buscando flores,
de pronto noté la magia que tienen ciertos amores.
En Baracaldo se entiende lo grande de nacer libre,
y su gente los comprende y sobre aquello se escribe.
Soñar no cuesta dinero me decían de chiquillo,
luego sin ser embustero escuché cantar al grillo.
“LA LIBERTAD” de una tierra que sabe de soluciones,
que detrás dejo esa guerra que siempre da maldiciones.
Entre los hornos de fuego Baracaldo son razones,
en el pasado despliego muchas buenas intenciones.
Cuando la vida te deja en caminos sin futuro,
tienes que tener constancia y tratar de hacerte el duro.
Abrazando Baracaldo el amor se hace posible,
no presumas tener saldo ni querer ser invisible.
Sentir la voz de tu tierra es un camino pisado,
alguien pensó que se entierra un trozo casi olvidado.
Baracaldo con respeto por sus muchos inmigrados,
que fueron pasando el veto entre sueños terminados.
No vale gritar al viento en las frías madrugadas,
ni pregonar sufrimiento en preciosas alboradas.
Vivir alegre y contento teniendo al lado la Ría,
“LA LIBERTAD” te da aliento para gozar su alegría.
G X Cantalapiedra.
7 – 7 – 2020.