BARAKALDO: BARACALDO. CUANDO LOS VIRUS AVANZAN....

BARACALDO. CUANDO LOS VIRUS AVANZAN.
Viendo los viejos apuntes, de otra pandemia pasada, el año 1918, es hoy fecha recordada. Hubo primero un aviso, con sus muertes y sus calmas, luego en agosto un suplicio con muertes amontonadas. Animales que morían, perros que nunca ladraban, los gatos se consumían sobre las tristes moradas. Incluso los pajarillos terminaban en sus jaulas, se murieron hasta grillos en las tardes calentadas. Algunos con mascarillas tuvieron vida salvada, al ver que muchos vecinos se fueron con voz callada. Fueron muchos los humanos que su vida terminaba, no sirvieron los consejos ni guardaron la distancia. La pandemia se extendía, por el mundo y en España, mucha gente se moría sin saber cuál fue la causa. Hoy recordamos las fechas de aquellas sombras pasadas, con las muertes tan derechas que el mundo entero temblaba. El otoño venidero puede borrar las distancias, y dejar el semillero de juventud apagada. Nadie se sienta salvado, nadie quiera borrar nada, el camino es amargado en las fechas complicadas. La pandemia sigue activa, viene mostrando sus garras, dicen que a veces motiva a sus temidas amarras. Mascarillas de defensa, para así poder frenarla, En Baracaldo esta tensa y nadie quiere mirarla. Los hospitales esperan otras nuevas oleadas, que a muchos les desesperan al no ver gentes cuidadas. Guardando siempre distancia con las mascarillas puestas, de nada vale arrogancia si no cerramos las puertas. Hoy tiemblo al ver los contagios, miedo me da ver las gentes, que parecen vivir plagios en muchos de los ambientes. Tendremos un mal futuro, ya lo comenta la gente, vemos el camino oscuro con la muerte más presente. Baracaldo con visiones de esta maldita epidemia, hoy se ven las previsiones que no parecen comedia. Amarrados a la vida, para evitar temporales, la barca se nota hundida en los momentos fatales. Ya no valen los refranes, ni las viejas letanías, ni pensar en ciertos males que anulan las alegrías. No dejemos las defensas, que son esas mascarillas, en estas horas tan tensas sufren las gentes sencillas. Vascongadas de leyendas, con pandemias de agonía, Baracaldo tiene sendas donde se llega a su ría. No vale forzar lamentos, ni sirve la hipocresía, si llegan los sufrimientos se termina la alegría…..
G X Cantalapiedra. 9 – 7 – 2020.