Desde los primeros pasos de este proyecto museístico que mañana celebra sus dos primeras décadas de funcionamiento los aspectos económicos se midieron con los culturales. Veinte años después, las cifras los avalan: los ingresos permitieron que en 2016 el
museo alcanzara un 68% de autofinanciación. En la imagen, el
edificio brillante al fondo de la
calle Iparraguirre.