Mi queridísimo y gran amigo: Muchísimas gracias por tu amable y cariñosa deferencia. Menos mal que alguien se acuerda de mí. No te he podido contestar antes porque estaba trabajando. Me levanto a las siete y estoy en contínua actividad hasta las 8 ó las nueve de la tarde, haciendo un brevísimo receso para comer. Combino la actividad publica por las mañanas y la privada por la tarde. Llevo así 42 años y ya mis fuerzas comienzan a flaquear. He visto mucho sufrimiento en esta larga etapa de la vida, ... (ver texto completo)
Aunque tarde ¡Felicidades! Octavio. Sabia que era tu santo y te felicite en tu correo pero debes haberlo borrado porque lo ha devuelto. Podías enviármelo, si todavía tienes el mío
Un fuerte abrazo
Mª José
Un fuerte abrazo
Mª José