Totalmente de acuerdo.
Aunque la bofetada de realidad habría que dársela a muchos, por motivos de este tipo, por motivos económicos y por motivos de decencia social.
Hace ya varios años que en este bendito país estamos atravesando una fuerte crisis económica sobrevenida como consecuencia de la crisis mundial que, ni los más "prestigiosos" economistas, llegaron a suponer como posible.
Otros "iluminados" lo llaman crisis moral o de valores, claro que, cada uno lo quiere llevar a su terreno para sacarle algún partido, porque de todas las crisis que han existido, siempre hubo alguien que sacó tajada.
Desde que la roja, la selección española de fútbol, empezó a ganar títulos y a posicionarse como la envidia de todos en cuanto a palmarés reciente, nivel de juego y calidad de sus integrantes, en España se ha empezado a oír a la gente cantar eso de: "yo soy español español español, yo soy español....". Mostrando su orgullo y desechando viejos fantasmas, bulos, mitos o creencias hacia los españoles por parte de los ciudadanos de otros países.
Ahora con dos eurocopas, un mundial, copas de tenis, campeonatos de fórmula 1, etc, sacamos pecho y levantamos cabeza mientras nos ven pasar. La gente esta orgullosa de sentirse fuerte, nos vemos capaces de superar cualquier desafío.
Pues yo, sintiéndolo mucho, no puedo decir que sienta tal orgullo. Cada vez siento más vergüenza de pertenecer a un país donde se recortan brutalmente los derechos sociales, dejando a las personas dependientes abandonadas a su suerte. Un país donde se aprueba una reforma laboral que esta dejando cada día a más gente sin su sustento, y esto es una cadena que nos tiene que llegar. Un país donde se financia una religión y rescata a los bancos, mientras se deja en
la indigencia a personas que han pagado con sus impuestos ese rescate y han dedicado su vida a trabajar para poder pagar la casa, y que ahora gracias a esta puta crisis, se ven en la imposibilidad de hacer frente a ese pago por dar de comer a sus hijos. Un país donde se va a crear un banco malo para comprar a los bancos sus activos tóxicos y así puedan seguir teniendo beneficios y desahuciando a las personas.
Es curioso todo esto. Resulta que el trabajador pide un préstamo al banco para comprar una casa que ha financiado ese banco, el banco le da más préstamo del necesario para esa compra, el banco provoca una crisis que nos lleva a la ruina. Ese banco es rescatado con dinero de los ciudadanos para que salga a flote, mientras este banco pone en la calle al trabajador por impago de la hipoteca, mientras el ciudadano, una vez puesto en la calle ha de seguir pagando una deuda que dejó de pagar porque no podía. El banco revende la vivienda al banco malo, pero no por la deuda pendiente del ciudadano, si no por el valor de la vivienda en el momento de la venta, es decir, vende la vivienda por su precio original, que cobra del banco malo con dinero público, más el dinero que le pagó mientras pudo el ciudadano y el dinero que ha de pagarle una vez puesto en la calle. Es decir vende la vivienda dos veces.
El ciudadano con sus impuestos rescata al banco cabrón, financia el banco malo que sanea los activos del banco cabrón, pero le ponen en la calle mientras debe seguir pagando al banco cabrón la deuda. Y para colmo los políticos le siguen pidiendo sacrificios para ellos tener coches oficiales, tabletas y teléfonos de última generación, mientras gestionan este desaguisado. Y la iglesia les dice que están rezando por ellos, y les recomienda que recen ellos también...
Yo no siento ese orgullo patrio que tanta gente siente por vivir en un país con estas prácticas.
Ojalá en un pronto futuro tenga motivos para sentir ese orgullo.
Que os vaya bonito
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