Desde finales de los años 50 y toda la década de los 60, había un grupo de niños jabeños (digo niños porque empezaban con 10 años) que para poder estudiar el Bachiller, tenían que desplazarse en bicicleta cada día a Villanueva de la Serena por un camino de tierra con todo lo que ello conlleva. Alguno no alcanzaban a los pedales y para ello había dos soluciones, dar pedales entrando la pierna por el cuadro de la bici, o bien quitar el sillín y poner en su lugar un cojín de casa y atarle a la barra ... (ver texto completo)
¿Sabes que emocionas?.
Hasta pasado mañana,
Hasta pasado mañana,