Como saben todo el jabeñerío, y muchos amigos de la comarca y catalanes que me han felicitado, soy un fanático seguidor del At. Madrid de los de toda la vida. A mí más que gustarme el fútbol lo que de verdad me apasiona es el Atleti, formar parte de esa dinastía de leprosos que marginados por todos los estamentos encuentran refugio para su pasión y su duelo en la ribera del Manzanares. Yo, que siempre he defendido la épica del perdedor y la estética del fracaso, que siempre me he sentido más cerca ... (ver texto completo)
Chascho, chascho, chascho,